La Historia de las Linternas de Halloween

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¿Cónoces la historia de las linternas de Halloween, o los Jack-o-Lanterns, sus raices y la tradición?

La calabaza consiguió su papel como un símbolo importante de Halloween gracias a la inmigración irlandesa a América y a la abundancia de calabazas en su nueva tierra. En Irlanda, era más común tallar caras aterrorizantes en nabos grandes, pero pronto descubrieron que la calabaza se prestaba aún mejor a esta labor de tradición y creatividad.

 

¿Por qué los americanos llaman a las calabazas talladas “Jack O’Lanterns”? Supuestamente viene de la leyenda irlandesa de “Stingy Jack” (Tacaño Jack).

 

Jack, un campesino irlandés, estaba de copas con el diablo, cuando se dieron cuenta que ninguno tenía dinero encima. Convenció al diablo que se convierta en una moneda para pagar la ronda, pero en vez de pasar la moneda al barman, la metió en su bolsillo junto a una cruz de plata, para que el diablo no pudiese salir. Al final, dejó salir al diablo a cambio de la promesa de que el diablo no le iba a molestar durante por lo menos un año. Al año, el diablo vino a por él, pero esta vez Jack (que parece que tenía el don de hablar, ¡como buen irlandés que era!) le convenció para que subiera a un árbol y cogiera fruta para compartir. Mientras el diablo cosechaba, Jack talló una cruz en el tronco del árbol para que el diablo no pudiera bajar. Al final le dejó bajar a cambio de la promesa de no molestarle durante 10 años más y si muriera, no llevar su alma.

 

Al poco tiempo, Jack murió. Dios no le quería en el cielo por ser tramposo, y el diablo, por su promesa, tampoco podía dejarle entrar en el infierno. El diablo le echó con sólo un carbón ardiendo para iluminar su camino. Jack metió este carbón en un nabo tallado, que luego se llegó a conocer como “Jack of the Lantern” (Jack de la linterna) o “Jack O’Lantern”.